viernes, 19 de agosto de 2016
EL RINCÓN DEL PINCHADISCOS: the Rattles "THE WITCH"
En esencia el rock'n'roll era esto. El último reducto. Nuestro código secreto. Siempre lo fue. "Tienes un arma chaval": así que dispara, sientelo, revélate, grita, salta, incordia, disfruta, emociónate, haz el amor... ¡escúpelo todo de una puñetera vez!. Fue bonito mientras duró. Ahora aquel fuego está bajo control. No sé quien amañó la partida, el momento en que se truncó todo. Así que volver a sentir esa experiencia a estas alturas del cotarro, aunque sea en cuentagotas, es lo único que me motiva a la hora de escribir estas líneas. Sobretodo cuando descubres que esa llama, ese poder oculto del que la gente huye sin prestar demasiada atención, era real e intenso. No tiene secreto. Él se apodera de tí y no al revés. De repente quedas atrapado en un universo paralelo durante tres minutos y sientes como una descarga eléctrica recorre tu esqueleto de arriba a abajo. El gran subidón.
Los teutones The Rattles esparcieron su pócima allá por la década de los sesenta -el disco que nos ocupa, The Witch" salió allá por 1971- pero sus embrujos todavía siguen sonando atronadores y poderosos sin perder ni un ápice de su energía vital. Erupciones volcánicas en forma de lisérgicos riffs y melodías como hachazos perforan tu sesera. Hijos bastardos de The Who, Black Sabbath y Jefferson Airplane (el parentesco con la banda californiana tal vez tenga mucho que ver con las dotes vocales de la israelí de cuna Edna Bejarano) estos greñudos piojosos de la Selva Negra te hacen sentir el rey de la puta carretera. Que nadie se interponga en tu camino chaval.