jueves, 10 de abril de 2014

Aquellos maravillosos años: MONOPATÍN, Un documental de Pedro Temboury

Conocíamos las muchas gamberradas en las que andaba metido el malagueño Pedro Temboury: sus inicios como ayudante y chico-para-todo del maestro Jess Franco; por ser el realizador del corto de culto Vida y Muerte de un colecionista de discos (1992); su debut en el cine de serie B (cabría decir serie Z) con delirantes engendros casposos como Karate A Muerte En Torremolinos (2001) y Ellos robaron la picha de Hitler (2006); su lúcida colaboración en fanzines míticos como 2000 Maníacos; un excelente gusto musical (cañero y melódico punk rocker de la cabeza a los pies)... Desde ahora habrá que añadir una nueva y gratificante faceta a su humilde currículum: la de documentalista de cine. Lo sabíamos, cualquier cosa en la que anduviese metido el molón realizador andaluz merecería la pena. Y menuda delicia de documental se ha sacado el chavalote de la manga. Canal + estrenó hace poco MONOPATÍN (2013) y nosotros se lo recomendamos a todo tumbero cuarentón (para que se emocione) y, ya de paso, a todo skater hip-hopero juvenil (para que aprenda Historia de la Calle y estudie cambiar de rollo musical) que alguna vez se haya metido una ostia subido a una estrecha tabla rodante marca Sancheski. Un ejercicio de nostalgia ochentera facturado por un ramoniano fanático del monopatín que sabe explorar de manera convincente rampas, cuestas, curvas, aceras y recovecos varios de nuestra jóven memoria -la de un país en transición- a través de este espectacular deporte callejero y libre (¡atentos a las imágenes de archivo!). Los duros inicios, el boom, los pioneros, los equipos, las firmas deportivas, santuarios, lugares y nombres propios... de todo esto y un poco más nos habla Temboury y los entrevistados protagonistas en este quinqui documental. No esperen grandes acrobacias en esta cinta, ni estamos en Los Angeles ni la dirige Michael Moore (menos mal). Como complemento espérense ustedes una banda sonora de aúpa. Pedrito, coleccionista de discos descatalogados e imposibles, nos brinda el mejor repertorio de garage-punk-rock underground nacional que podías echarte a los oídos en aquella época (y en cualquier otra): Golden Zombies, Imperial Surfers, Dr. Explosión (Let's go in 69), Fracción del Ejército Rojo, Buenas Vibraciones (Colegas del universo), Farmacia de Guardia ('Cazadora de Cuero'), Los Vegetales (Chico Sencillo; Zona Negativa), Mastretta, La Banda del Otro Lado, Cerebros Exprimidos (Exprímelo), Glutamato Ye-yé (La balada de Karen Quinlan)... y, como no podía ser de otra manera, La Banda Trapera del Río cerrando con el trallazo 'Monopatín' el sentir de toda una generación. Monigote el que no bote.


1 comentario:

  1. Excelente documental que pasé por alto en su momento y que debería ver, puesto que me lo recomendaron. Un abrazo, caballero. Pase buen fin de semana.

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