martes, 29 de diciembre de 2009
- HOOKERS II: ¡MUERTE AL FALSO METAL!
"BLACK VISIONS OF CRIMSON WISDOM" (HOOKERS II, 1999)
¡Quién pillase este discazo con 14 tacos!... Que bien me hubiese venido para descubrir (mucho antes) que había algo más allá del heavy y sus poderos riffs. Música para allanar el terreno... Me hubiese gustado tenerlos al lado de los Mitfits, mis discos de Motorhead y los Ramones... para disfrutarlos todos en uno. La rabia del hardcore, la suciedad del punk, la velocidad del speed metal, los gritos del ruido (permitidme este desvarío)... Menudas pintas. Dan miedo desde la portada misma. ¡Y qué letras!, "Maximun Overdrive", "Black Magic Stallion", "The End is comin' ", "Into Glory Ride"... los títulos lo dicen todo. Más franqueza y declaración de intenciones, imposible. Títulos que remiten a grandes clásicos del heavy como "Hell Bent" que recuerda aquel de Judas Priest (Hell Bent for Leather), o el "Ball Crusher Love Machine" en honor aquel tema de los primerizos Wasp (Love Machine)que suena como si a Blackie Lawless le metieran un cohete a propulsión por el culo. Sí amigos, no estoy loco (todavía).
La british ivasion, el punk-rock, el hardcore más básico, el garage garrulo y el speed metal más loco, todo junto, así es el sonido de los americanos HOOKERS II. Grupo alejado de tendencias y modas. Unos venditos desconocidos. Su vocalista se hace llamar The Rock n' Roll Outlaw, y a su lado Glen Danzig queda como una hermanita de la caridad. Sus cuerdas vocales arrancan desde una tubería oxidada, corrosiva, y de un "sonroje" alucinante. El grandullón berrea sin parar sobre temas apocalípticos, pactos con el demonio, bestias del asfalto, bombas megatómicas y demás gozadas de clase B. Si todavía crees que lo has escuchado todo, espera a descubrir a estos personajes. Si babeas por genuinos desgraciados como The Candy Snatchers o unos Black Jack (los del sello Estrus y su maravilloso Lp de 1997), si piensas que corre sangre caliente por tus venas y veneras grupazos como Mitfits, Zeke o Poison Idea éste será tu disco de cabecera y te verás repitiendo hasta la saciedad sus melódicos estribillos tipo: "oh, oh, oh, ohhhhh...Children of the night..." casi sin darte cuenta. ¡¡¡DEATH TO FALSE METAL!!!
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