"Yo Soy la Revolución" es su título en habla hispana pero también es conocida como "A Bullet for a General" o en su original "¿Quién Sabe?", y está dirigida por el realizador italiano Damiano Damiani en 1968, y os aseguro que es uno de los mejores spaghettis que tuve ocasión de degustar. Esta protagonizada por Klaus Kinski (el "Santo") en una de sus inolvidables interpretaciones... génio y figura hasta la sepultura, y por todo un clásico del género en cuestión como es Gean Maria Volontè (en el papel de "el Chucho") conocido actor italiano de izquierdas al igual que su compratriota Lou Castel (que aunque no viene al caso trabajo con Wenders y Fassbinder), de ahí la valentía de acometer un western que se podría tildar de anarco-comunista (como bien opina el crítico especialista en estos menesteres bologñeses y casi siempre de fiar Carlos Aguilar) y facturado con una sencillez ejemplar que bien pudieron apreciar notables cineastas como Brooks o Peckinpah a la hora de acometer dos de sus películas más emblemáticas dentro del western como pueden ser "Grupo Salvaje" y "Los Profesionales". De ahí la importancia de YO SOY LA REVOLUCION dentro del género spaghetti, una péli que hará las delicias de los más fanáticos seguidores del polvoriento far-west y que no defraudará a aquellos otros, digamos más exigentes, que piensan que ya lo han visto todo. Ambientada durante la revolución mexicana lo que te encontrarás en este largometraje no es dificil de imaginar... tiroteos por doquier, caracterizaciones memorables, diálogos secos e hilarantes, música maravillosa, asaltos, trenes, forajidos, bandoleras, Generales villanos, bellezas mexicanas...y mucha dinamita ¿de verdad no os parece una escusa apetecible?.
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